En un lugar de la cancha

Si nadie lo remedia (y se me cura la quemadura que me hice con el césped artificial en mi primer partido de fútbol después de casi cuarenta años), aquí estaremos, en el torneo benéfico, el próximo 18 de octubre, haciendo como que sé parar en el equipo de la Cervantina FC. Es evidente que lo único que hace falta para formar parte del club es haber publicado algún libro, lo de saber jugar al deporte de la pelota debe de ser lo de menos. (O que se han quedado sin portero para la ocasión, claro.)

Gracias por invitarme y por poder participar, haré lo imposible porque parezca que sé más de lo que en realidad sé. Algo fácil, porque por saber, hasta hace dos semanas ni sabía que el portero no podía recibir un balón y atajarlo con las manos si venía de alguien de su propio equipo.

Hambre x HAMBRE. Ayuno ético por Palestina

Cuando ve uno, semana tras semana, y año tras año, a personas de los colectivos de apoyo a Palestina, con más o menos ganas, eso nunca lo sabremos, pero constantes y firmes, ¿quién soy yo para perder la esperanza? Ni osé cantar temas cáusticos, no podía tocar, era más bien el momento de dar las gracias.

Había peques en los actos, un buen grupete, aunque solo fuera por elles, para que recuerden que, cuando nadie hizo nada, estuvieron con su familia coloreando sandías, o pintándoselas en la cara, o haciendo barquitos y postales con los colores de la bandera Palestina… P’alante. Seguimos en lucha. ¡¡VIVA PALESTINA LIBRE!!

Ecovidrio no tiene el síndrome del impostor

Pues eso, que acabo de ver en la calle un anuncio de Ecovidrio en una marquesina y más coraje no me ha podido dar. Los ojos como platos, oiga, se me salían de las órbitas.

Se basa el cartelito de marras en su campaña de mierda para desmitificar, según dicen, las fake news sobre el reciclaje del vidrio en España. Pa conocer un poco el trasunto, comparto con dolor de estómago el vídeo: «Hay más de 300.000 contenedores verdes en las calles. Y luego a quien dice que no tiene dónde dejar el vidrio».

Para empezar: que sepas que si no reciclas vidrio la culpa es tuya que eres un mierdecilla y no te esfuerzas. Da igual que omitan que la responsabilidad y obligación legal de hacerlo no son de la ciudadanía, sino de los Ayuntamientos. ¡La culpa es tuya, inútil! Como la de los microplásticos y los nanoplásticos en los océanos, la placenta y el cerebro humano por no llevar una bolsa de plástico al súper o a la tiende tu barrio que luego rellenas de envases de plástico de multinacionales que tienen menos culpa que tú.

El caso es que hay un par de detalles chiquitinos que también se le ha olvidado comentar a Ecobodrio, digo vidrio:

2021: Greenpeace denuncia que la mala gestión de Ecoembes y Ecovidrio cuesta a a los ayuntamientos 1.700 millones. La organización ecologista asegura que la dejación en la gestión que Ecoembes hace de sus envases cuesta a cada ciudadano más de 36 euros al año.

2024: La CNMC se harta del monopolio de Ecoembes y Ecovidrio. El organismo vuelve a señalar a las dos empresas de reciclaje copan el mercado y pide más transparencia y control sobre ellas.

Y, bueno, con eso de desmontar los falsos mitos y las fake news, no han caído en que hay estadísticas en todas partes y cuando dicen que, gracias a su trabajo, España está en la avanzadilla del reciclaje de vidrio en Europa y que somos un ejemplo, no ponen demasiados datos de otros países, seguramente sin maldad, porque no los han encontrao. Les echo una mano con el de hace dos años. Yo creo que tan bien tan bien… no estamos, a lo mejor bastante más mal que bien, cuando solo hay ocho países por detrás nuestra: Grecia, Hungría, Portugal, Chipre, Malta, Croacia, Rumanía y Lituania. Sí, son esos, no es un error.